II Jornadas del bocarte y la anchoa de Laredo

18 establecimientos de la villa ofrecen, hasta el próximo domingo 29, pincho y bebida a 2,50 euros.

Las II Jornadas del bocarte y la anchoa de Laredo coinciden de nuevo con la costera de este pescado típico de Cantabria. Esta iniciativa, impulsada por los hosteleros de Laredo, cuenta con la colaboración del Ayuntamiento y la práctica totalidad de las conserveras laredanas para potenciar el consumo de este producto que se encuentra en plena temporada.

Un total de 18 establecimientos –de 12.00 a 15.00 y de 20.00 a 23.00 horas–, ofrecen durante estos días, y hasta el próximo domingo día 29, originales recetas marineras en versión pincho, con bocarte, anchoa o boquerón como protagonistas, a un precio de 2,50 euros, incluyendo vino, penique (mini caña) o mosto.

Un bocado exquisito

Uno de los tesoros más apreciados que guarda el Mar Cantábrico es el bocarte, un bocado exquisito y, por supuesto, un auténtico manjar. De ello dieron fe los italianos, quienes descubrieron a comienzos del siglo pasado, que la anchoa del Cantábrico era de una calidad infinitamente superior a la suya y ante esta evidencia decidieron quedarse en Santoña, para poner en marcha las primeras empresas dedicadas a la fabricación de Anchoas en Salazón y en aceite, las conserveras.

Producto de gran tradición en la gastronomía de la villa pejina, el bocarte –Engraulis Encrasicolus, como se conoce científicamente a este pescado– destaca por su intenso sabor y su textura suave. Fresco, rebozado o frito; en conserva o en vinagre, la anchoa del Cantábrico es un alimento saludable, rico en nutrientes como el omega 3, y minerales como el calcio, magnesio, hierro y potasio, además de vitaminas antioxidantes, liposaludables, B6, B12 y D2, entre otras.

Belleza natural

Situada entre la ría de Treto y la bahía de Santoña, Laredo es una de las principales localidades turísticas del litoral Cantábrico, dividida en tres zonas bien diferenciadas, como son La Puebla Vieja, el Arrabal y la zona del Ensanche.

Villa declarada conjunto histórico artístico en 1970, Laredo es, además, un excelente destino náutico.

Rodeada de mar y montaña, la localidad permite disfrutar de arenales de gran belleza y calidad como la playa de La Salvé y de importantes espacios naturales protegidos como las marismas de Santoña, Victoria y Joyel.