Tradicionalmente la Navidad es una época de excesos que, a partir de Año Nuevo, intentamos paliar de alguna manera con buenos propósitos, que a veces no duran lo suficiente como para que surtan efecto. ¿Quién no se ha apuntado en enero al gimnasio y en febrero ya ha dejado de ir?
Pues bien, desde aquí no os quiero desanimar, es importante fijarse objetivos saludables para el año próximo y con un poco de fuerza de voluntad estoy seguro que los lograréis alcanzar. Pero no puedo dejar pasar por alto lo que esta semana os quiero proponer que es, nada más y nada menos, que un par de dulces navideños para que después de alguna de las múltiples cenas o comidas de estas semanas vuestros familiares os saquen a hombros por la puerta grande cual torero y sepan realmente quien es el amo de los fogones en casa.
En realidad son dos recetas bien sencillas e incluso compatibles y se pueden servir juntas. En primer lugar vamos a hacer las clásicas tostadas o torrijas, y una pannacotta de turrón, más navideños que los renos de Santa.
Existen miles de interpretaciones de las tostadas, fundamental es contar con un buen pan, unos ricos huevos ecológicos, una rama de canela, azúcar y aceite para freír.
Cortamos las rebanadas de pan, a mi me gusta de 1 cm y medio aproximadamente y ponemos a hervir la leche con el azúcar, la canela a fuego medio, cuando hierva retiramos el cazo del fuego y dejamos enfriar. Cuando esté lo suficientemente fría vamos a ir pasando las rebanadas de pan la leche empapándolas por ambos lados de manera que queden bien húmedas con cuidado que no se nos rompan.
Batimos los huevos y las pasamos una a una antes de freírlas en bastante aceite de oliva. Las secamos con papel de cocina para eliminar el exceso de aceite y espolvoreamos con azúcar y canela en polvo.
Ya tenemos las tostadas o torrijas y nos ponemos con la pannacotta. Sinceramente es de los postres mas sencillos que existen. Solo necesitamos 250 ml de nata liquida, 75 ml de leche entera, 150 gr de turrón (el que mas os guste), 15 gr de azúcar glas y 4 hojas de gelatina de cola de pescado.
Ponemos en un bol con agua fría las hojas de gelatina unos minutos y en un cazo la nata con el azúcar y la leche, lo ponemos a fuego que vaya calentando poco a poco. Troceamos el turrón y lo añadimos cuando la mezcla esté caliente para que se vaya derritiendo. Lo movemos bien con unas varillas para integrarlo todo completamente.
Lo dejamos al fuego y cuando empiece a hervir lo quitamos del fuego, escurrimos muy bien las hojas de gelatina y las añadimos removiendo para que se disuelvan. Ya lo tenemos listo, lo servimos en unos vasos bajos y lo ponemos a enfriar unas horas antes de sacarlo.
Podemos presentarlo en un plato con una tostada y acompañarlo de alguna fruta roja para decorar.
Son dos postres fáciles y perfectos para estas fiestas que funcionan igual de bien juntos o por separado. Eso si, 100% recomendables.
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