Chorizo sin carne Chorizo sin carne
Esta de moda últimamente lo verano, algo semejante al ala más radical del vegetarianismo. Los veganos no solo suprimen de su dieta los productos... Chorizo sin carne

Esta de moda últimamente lo verano, algo semejante al ala más radical del vegetarianismo. Los veganos no solo suprimen de su dieta los productos de origen animal sino que además luchan con furor contra el ‘maltrato’ de todo ser viviente. Una ‘nueva’ filosofía de vida en España con muchos años de historia en otros países europeos.

Navegando por Internet veo una receta de chorizo vegano que se hace con gluten, arroz blanco, pan rallado, salsa de soja, pimentón, guindillas, ajo en polvo, sal, levadura y agua. En este caso, la tripa de cerdo se sustituye por papel film que, una vez relleno de la masa y agujereado, se pondrá a cocer en agua hirviendo. Nada de carne ni ingrediente relacionado con animal alguno. El chorizo vegano se fríe o se pasa por la plancha vuelta y vuelta.

Este producto recuerda a otros de nula porción de carne y que llevan años formando parte de la gastronomía popular de varias regiones del país. Solo que ellos llevan ya grasa y tripa de cerdo. Uno de estos productos típicos es el farinato salmantino, que tiene sus orígenes en la localidad de Ciudad Rodrigo. El llamado ‘chorizo del pobre’ se elabora con manteca de cerdo, pan, harina, pimentón, cebolla, ajo, sal, anises y aguardiente. Un embutido ‘potente’ que se come frito, con huevos, y al que en León se le conoce como androjas y en Portugal como farinheira. Dice el refranero popular que «el farinato ‘pal’ gato, la morcilla ‘pa’ la gallina, el chorizo ‘pa’quien lo hizo, y el lomo yo me lo como». Similar es la patatera extremeña, con grasa de cerdo ibérico, puré de patatas, pimentón de la Vera, ajo y sal. Los que hicieron la mili en Cáceres la recuerdan con mucho cariño. También sin carne se prepara la morcilla de calabaza, generalmente de Ávila, con manteca de cerdo, calabaza, cebolla, arroz, patatas, ajo, pimentón, perejil, pimienta, clavos y comino.

No hay que olvidarse tampoco de nuestro borono lebaniego.

Diego Ruiz Redactor

Santander 1960. Universidad de Cantabria. Sección de Deportes, Cantabria en la Mesa y, a veces, algo de toros.

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