Este crudo invierno en el que estamos sumergidos nos está obligando a tirar de plato de cuchara, lo cual es genial porque apetece un...

Este crudo invierno en el que estamos sumergidos nos está obligando a tirar de plato de cuchara, lo cual es genial porque apetece un montón.

Esta semana vamos a adaptar una receta norteamericana que resulta sabrosísima a nuestra cocina, reemplazando algunos ingredientes, vamos, mejorando el resultado original sin duda alguna.

El chili con carne es una receta sencillísima y muy resultona se trata de mezclar unos frijoles cocidos con carne picada especiada y picante, con lo cual el resultado es magnífico.

Nosotros vamos a utilizar caricos que haremos a la manera tradicional que tantos éxitos nos da en los fríos días invernales. Intentaremos no dejarlos demasiado secos para que luego se integre el resto de ingredientes de manera equilibrada.

Por otra parte, en una sartén marcaremos un poco la carne picada con sal y pimienta y procederemos a reservarla. En esa misma sartén tostaremos una cucharadita de comino para que desprenda todo su aroma y añadiremos cebolla, ajo, zanahoria, todo cortado muy pequeñito pochándolo lentamente.

Añadiremos unos chiles frescos al gusto, recomiendo probarlo para saber la intensidad del picante, sobre todo si lo van a comer niños es preferible no incluirlos y que cada uno añada el picante posteriormente en su plato.

Una vez tengamos las verduras bien pochadas añadiremos una cucharadita de pimentón ahumado dulce o picante, otra vez al gusto, y seguidamente unos tomates pelados y troceados

Dejaremos que se sofría todo junto y añadiremos la carne que teníamos reservada. Será necesario que cuezca todo junto unos minutos y se lo añadimos a los caricos que ya teníamos hechos.

Damos un hervor.

Este espectacular guiso lo podemos acompañar con arroz blanco para que sea el plato completo. Y si les gusta el picante aquí es donde pueden añadir todo el que quiera porque en esta receta realza los sabores de manera sorprendente.

Ricardo Ezcurdia Cocinero

Para este profesional del mundo de la joyería la cocina es su auténtica pasión, lo que le ha llevado a realizar numerosos cursos junto a grandes cocineros. Esta afición le animó a inscribirse en el concurso televisivo Master chef, donde en alguna edición se ha quedado a escasos pasos de ser seleccionados. Colaborador habitual en Cantabria en la Mesa, pone el contrapunto con sus artículos dando la visión del cocinero aficionado, compartiendo con los lectores sus recetas y sus trucos.

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